18 de abril de 2007


Escuela Sindical del Movimiento
de Trabajadores por la Base
-MTB-


Junto con saludarte fraternalmente, el Movimiento de Trabajadores por la Base tiene el agrado de invitarte a la continuación de su Primera Escuela Sindical que se llevará a cabo este Martes 24 a las 18:45 horas en Alonso Ovalle Nº1535 tercer piso sede de la Confederación General de Trabajadores CGT-MOSICAM. En esta oportunidad trataremos el Contrato Laboral y contaremos con la presencia de Manuel Ahumada, Presidente de la CGT, quien compartirá con nosotros su experiencia como organización sindical. Esperamos contar con vuestra presencia, pues tenemos la convicción de que es solo organizados que podemos dar la lucha por Una Vida Digna para Tod@s.


"Por una Vida Digna para Tod@s"

6 de abril de 2007



MTB en Educación 2007
Encuentro por la Unidad de los Educadores



Por Carolina Vargas Bruna

En el Congreso de Pedagogía realizado en la ciudad de la Habana se congregaron 5.200 maestros de todas las latitudes del mundo, Cuba los recibe y en este país encontramos las vías democráticas para participar, a través del diálogo, de las distintas prácticas pedagógicas y experiencias educativas que son expuestas por los maestros que concurren al evento.

Realidad Educacional Cubana

Cuba posee un maestro innato Fidel, quien nos ha definido qué debemos entender por educar: “Educar es todo, educar es sembrar valores, es desarrollar una ética, una actitud ante la vida. Educar es sembrar sentimientos. Educar es buscar todo lo bueno que pueda estar en el alma de un ser humano, cuyo desarrollo es una lucha de contrarios, tendencias instintivas al egoísmo y a otras actitudes que han de ser contrarrestadas y solo pueden ser contrarrestadas por la conciencia”.
Cuba es el país de América Latina que más invierte en educación un 12.3% del PIB ocupando el primer lugar en el presupuesto nacional. Sin privatizar nunca una institución educativa, en ninguno de sus niveles, la última Revolución Educacional, que es la tercera, tiene entre una de sus medidas cumplidas contar en la educación primaria (primer a sexto grado) con 20 estudiantes por maestro apoyados de tecnologías comunicacionales como las tele clases y video clases en cada aula y softwares en correspondencia con los programas de estudio.
Para alcanzar el objetivo de una educación personalizada es imprescindible realizar un diagnóstico psicopedagógico, social y de salud de cada estudiante, todas estas informaciones se acumulan en el expediente escolar que acompaña al estudiante en toda su trayectoria por el Sistema Nacional de Educación, cada maestro hace entrega de este expediente al que lo sucede, así se facilita un tránsito armónico que evita el fracaso escolar y garantiza un ascenso sostenido en el aprendizaje y la formación de valores. Estos esfuerzos sistemáticos han permitido duplicar el ritmo del aprendizaje.

Hace cuatro años se comenzó a aplicar un nuevo modelo en la enseñanza secundaria (séptimo a noveno grado) que es el Profesor General Integral (PGI) que atiende con sentido educativo y conduce el aprendizaje de 15 estudiantes por aula, también con el auxilio de tele y video clases además de los softwares educativos correspondientes. Este modelo ha multiplicado el aprendizaje y ha reducido la repitencia y deserción escolar. Los estudiantes permanecen en las escuelas mañana y tarde y reciben, al igual que sus maestros, alimentación gratuita. En Cuba se aspira a que todos los ciudadanos adquieran una cultura general integral, esa es la tarea del proceso de enseñanza aprendizaje, esto implica una sólida preparación política, un profundo conocimiento de la historia, una formación económica, filosófica, científica, artística, literaria y jurídica, entre otras. Así los estudiantes cubanos podrán comprender el complejo panorama en que vive el mundo y luchar concientemente contra los peligros que acechan a la humanidad. La premisa es que solo educando se lograrán seres humanos mejores y concientes de su papel en la sociedad. Para salvar la humanidad hay que hacer una revolución educacional. ¿Podrá un iletrado o un semianalfabeto comprender los desafíos colosales que deben ser enfrentados y vencidos?
Fidel, al iniciar la campaña de alfabetización en los primeros años de la Revolución dijo al pueblo: “yo no les digo cree, les digo lee”.

Son cientos las medidas que incluyen la Tercera Revolución Educacional. Una que beneficia directamente a los maestros es la universalización de la educación superior que ha permitido llevar postgrados a todos los rincones del país, de esta manera 76 mil docentes están realizando la Maestría de Ciencias de la Educación sin costo alguno para ellos.
El socialismo en Cuba erradicó la explotación del hombre por el hombre dando paso a una sociedad donde la cooperación y la integración de esfuerzos guían la unidad del pueblo para alcanzar objetivos superiores.

Educación Política

Al presenciar los cursos que se presentaron en el Congreso se apreciaban gran cantidad, diversos en calidad y profundidad, experiencias Latinoamericanas de Educación Popular, propuestas de educación a la diversidad, trabajo y desarrollo local, educación para la paz y los derechos humanos, movimientos sociales, etc. Las conferencias a las que asistimos eran presentadas por Mejicanos, Brasileros, Nicaragüenses, Paraguayas, Peruanos, Cubanos, entre otras naciones de Latinoamérica.
La generalidad de las ponencias presenciadas, debido a que por la cantidad de cursos es imposible asistir a todas, eran experiencias de ONG’s, sí, las mismas que abundan por nuestros países del Tercer Mundo, que encuentran financiamientos varios para trabajar por la justicia, la igualdad entre hombres y mujeres, los derechos de los indígenas, etc. y claro…que analizando políticamente sus actividades, se trata en la mayoría de ellos, por no caer en generalidades injustas, de hacer un trabajo educacional en donde se mezclan distintos enfoques educacionales, ya sea constructivismo, humanismo, que son corrientes modernas donde el aprendizaje es una herramienta que le permite al ser humano adaptarse a la sociedad en la que vive y capacitarse para contribuir a la modernización de ésta.
Pero en eso sentimos un bocinazo, no sé, un llamado de atención, y como los profesores cubanos, que acostumbran como la mayoría de los cubanos, a realizar sus análisis dialécticos materialistas, en medio de una conferencia sobre Educación Popular y Movimientos Sociales donde se mostraba la mendicidad infantil en el Paraguay, una maestra cubana llora y les dice, que todas sus intenciones son muy buenas, pero mientras no haya en Latinoamérica un cambio político, esos males no terminarán.
Y ¡¡claro!! Sin la construcción de socialismo no se distribuyen de manera justa los conocimientos ni la cultura ¿es que el ejemplo cubano de 48 años no nos ha servido de nada a los maestros Latinoamericanos?
Cuba, adhiere en su concepción filosófica de la educación a la Teoría Histórico Cultural planteada por el filósofo y psicólogo soviético Lev S. Vigotsky (1896-1934), los planteamientos de Vigotsky acerca de la educación son sumamente interesantes y ofrecen una base original y sólida, erigida desde una concepción filosófica marxista, dialéctica y materialista por naturaleza.
En las universidades chilenas Vigotsky es clasificado como un constructivista y se conoce de él su teoría sobre la Zona de Desarrollo Próximo, pero se mutila todo su aporte a la tarea del proceso de enseñanza aprendizaje en relación a la transformación de la sociedad en que el ser humano vive. Este principio fundamental hay que levantar en las escuelas chilenas, con ejemplos claros se los podemos presentar.

1) ¿De qué sirve que los estudiantes de cuarto año básico sepan que Chile es el principal exportador de cobre a nivel mundial si no pueden saber que la extracción de este mineral es realizado por trasnacionales?
2) ¿De qué sirve que los estudiantes de quinto año básico sepan que existe un fenómeno que se llama efecto invernadero si no se discute en las aulas que Estados Unidos no ratificó el Protocolo de Kioto?
3) ¿De qué sirve que los estudiantes de tercer año básico sepan que los mapuche son un pueblo aborigen si no saben que hay mapuche encarcelados por luchar por sus derechos?
4) ¿De qué sirve que los estudiantes de octavo año básico realicen cálculos con porcentajes si no saben que en América Latina y el Caribe viven 209 millones de pobres que representan el 39.8% y que 41 millones de niños están sumidos en la indigencia y 22 millones deben trabajar para sobrevivir en esta región?

Sin un enfoque histórico cultural en las aulas no se logra comprender el mundo, por lo tanto, tampoco lograremos transformarlo. El propio Vigotsky señala: “Estudiar algo históricamente significa estudiarlo en movimiento. Esta es una exigencia fundamental del método dialéctico. Cuando en una investigación, se abarca el proceso de desarrollo de algún fenómeno en todas sus fases y cambios, desde que surge hasta que desaparece, ello implica poner de manifiesto su naturaleza, conocer su esencia”.
Pero para que los estudiantes comiencen a conocer la realidad, e inicien un análisis de la sociedad en que viven, en correspondencia con su edad, es preciso que quienes guiamos el procesos de enseñanza aprendizaje, es decir, los profesores, nos comprometamos y nos atrevamos a realizar un cambio drástico en nuestra práctica pedagógica. Un maestro no puede ser neutral, la despolitización también tiene su afiliación.
Los estudiantes son tan capaces como los adultos, nunca hay que subestimar a una mente infantil, no solo nuestros propios hijos deben saber contra qué hay que luchar, y por qué luchar, nuestros estudiantes tienen las mismas capacidades. El ejemplo de los maestros comprometidos, no solo es el de luchar por una educación pública, mientras eso no lo logramos debemos hacer entender a nuestros estudiantes por qué motivos ya no es pública, a qué intereses responde esta política, etc. Los niños y niñas son nuestros mejores aliados, como dijo José Martí, el apóstol de Cuba: “Los niños son la esperanza del mundo”. Comprometámonos como maestros a cambiar, planifiquemos nuestras enseñanzas con un certero fin clasista, l ya no debemos seguir educando para obedecer, hay que educar para conquistar el poder. Esa es nuestra tarea. 20, 30 o 50 años tardaremos, pero más tardaremos si seguimos predicando lo que nos imponen los planes y programas ministeriales, o acaso algo les ha enseñado, desde el punto de vista histórico cultural, las lecturas de Papelucho a nuestros estudiantes chilenos, con todo el respeto que se merece Marcela paz; que lean a Gabriela, que declamen …Dame la mano y danzaremos, dame la mano y me amarás como una sola flor seremos, como una flor y nada más…¿No es lo mismo que decir ALBA? Si educar para el socialismo es bello y más fácil de lo que pensábamos. Por la unidad de los educadores,

¡Seamos realistas, soñemos lo imposible!

Y como se escucha cada mañana en las escuelas cubanas: ¡Pioneros por el comunismo, seremos como el Che!


* Artículo publicado en nuestro segundo número de "El Despertar de los Trabajadores, órgano de difusión oficial del Movimiento de Trabajadores por la Base. -MTB-

2 de abril de 2007



¿Luchar por el Pan o por la Libertad?
...Problemas para un nuevo sindicalismo en Chile


Por Vicente Painel S.

“El trabajo nutre. La pereza encoleriza y enloquece"

José Martí.

Difícil pregunta inaugural: ¿Luchar por el pan o por la libertad?. Primero, es poco probable que alguien que no esté comido, que no tenga pan en el estómago se pueda hacer esa pregunta. Quizás por donde hay que empezar entonces, es por la siguiente interrogante ligada con el sujeto que normalmente se asocia a las rebeliones como posibilidades de transformaciones histórico- estructurales: ¿Por qué lucharía un hambriento, por el Pan o por la Libertad?. Luego, ¿significará, por secuencia lógica, que se necesita un pueblo hambriento para que haya una revolución? No y sí... No necesariamente, si bien la Revolución Rusa podría ser un ejemplo de éste fenómeno, la Revolución Cubana lo problematizaría, no porque Batista mantuviera repleto de bienestar económico a Cuba, sino porque no es 1959 el periodo en que Cuba haya estado peor económicamente y sin embargo, es el momento en que Cuba derriba su tiranía y comienza su revolución tomándose el poder y expulsando a los intereses norteamericanos. Entonces: ¿Ser dignos para comenzar a ser libres? o ¿ser libres para comenzar a ser dignos? Las dos cosas simultáneamente dijo un compañero, por allá otra compañera recalca ¡No hay que olvidar la dialéctica! Importante y solar afirmación, se acabó la diatriba, se acabó el ensayo, tenemos categórica respuesta. Pero, ¿Cómo se resuelve esto en la realidad es el dilema, hace desesperante la paradoja. Alguien apegado a los derechos humanos sostendrá: el ser humano por el solo hecho de ser humano es digno y tiene derecho a la libertad. Esto es en otras palabras, el ser humano tiene un derecho elemental que es el de alimentarse y por lo mismo tiene derecho a ser libre, o: “todo hombre nace libre y por lo mismo tiene derecho a alimentarse”...El problema es que en Argentina hace un par de años hubo niños que para la crisis del corralito murieron de hambre y en Chile para cuando la muerte del dictador, una niña también falleció de hambre en una población periférica, tal como en África, la África de los niños con pancita es conocida como el continente del hambre. Volvemos a la pregunta inaugural entonces: ¿Se debe luchar primero por el pan o por la libertad?
El presidente Lula al ganar la primera vez el gobierno dijo: yo no soy un revolucionario pero es revolucionario eliminar el hambre en el Brasil, mencionando su plan de hambre cero; sin embargo, eliminando el hambre no ha eliminado la pobreza que lo origina ni la mala distribución del ingreso que produce la pobreza. Una revolución como la revolución cubana se empinó en triunfo con la consigna originaria de Libertad o Muerte. Algún antincastrista dirá que Fidel niveló para abajo, ahora son todos pobres, no obstante, con la alta tasa de calidad de educación reconocida por UNESCO y de salud por OMS, se llega a la convicción de que los cubanos son equitativos en dignidad por lo que todos los cubanos aman a Cuba... son eminentemente cubanísimos. Y a todo esto: ¿Que es la libertad? Hacer lo que uno quiera dirá un individualista, siempre y cuando no afecte al otro agregará un liberal. Me parece, que la definición más completa es la que sugiere aquel cuadro en que una mujer con los pechos descubiertos encabeza la exaltación vulgar, con una bandera en una mano y con la otra convocando a seguir la senda, al lado un niño empuña una pistola. Nos referimos a que libertad es decidir, somos libres cuando empezamos a decidir, y he aquí lo paradójico: en nuestro país muchas veces hemos de hacer muchas cosas que no son de nuestro agrado, que nunca hemos decidido, para poder comer. Será acaso que el pan es enemigo de la libertad, es decir, que para comer tenemos que dejar de ser libres... Parece que se ha planteado el núcleo del problema: ¿Siempre es el trabajo un yugo que nos agobia? ¿Acaso el trabajo siempre está disociado con la libre determinación?, ¿estamos condenados al trabajo?
Hoy en Chile existe un 8 por ciento de sindicalización, nadie defiende el trabajo porque nadie quiere perder su empleo como lo demuestra una encuesta de opinión que acredita que uno de los mayores temores de los chilenos es perder el empleo, y claro, el que intenta sindicalizarse lo echan del trabajo. Pero, si imaginamos la posibilidad de una situación en que el trabajo haga sentirse pleno, entonces: “hago lo que he decidido”, lo que libremente elijo, he ahí una situación en que libertad y pan son dos cuestiones recíprocas porque por medio de ese trabajo que genera plenitud, obtengo el pan que me hace seguir trabajando, ejerciendo mi decisión, siendo libre. Será entonces, que los chilenos han dejado de decidir para poder comer, han delegado en otros las decisiones para poder existir, porque cuando se deciden a decidir (se sindicalizan, se lanzan a una huelga, reclaman, etc) se quedan sin empleo y se mueren de hambre como se supone pasaba en la UP cuando las largas filas para conseguir alimento (noción instaurada bajo forma ínter subjetiva por la dictadura que hace a los “upelientos” sentir culpa por haber ejercido gobierno). Acaso ése, es el verdadero trauma de este país y no el miedo a la represión política. ¿Qué tan mala la situación tendrá que estar en Chile, para que este país se vuelque a la calle pisando fuerte el pavimento, llegando a buscar la felicidad prisionera? ¿Cómo romper la paradoja, como componer la producción de lo circular, como comenzar a dar vuelta la tortilla? ¿Luchar por el Pan o luchar por la libertad?

¿Se puede luchar por el pan sin luchar por la libertad?

Relativo y absoluto…si y no. Con certeza por ejemplo, en algún momento de su vida la pequeña gigante Mélida Anaya Montes pensó para el Salvador la liberación al ir luchando por el pan, como sindicalista de acción y educadora de nuevo tipo, resolviendo esa paradoja de manera maravillosa al hacer cabalgar otra vez a Marti Farabundo. Sin embargo, es vital inmiscuirse en el cómo... ¿Sería válido plantear que el reformismo y la socialdemocracia son buenos ejemplos históricos de que se puede luchar por el pan sin hacerlo por la libertad? Por otro lado, en Chile, la alianza democrática después llamada Concertación demostró en dictadura que se podía luchar por la libertad sin luchar por el pan. Pero, es tan filosófico y a la vez tan práctico lo que establece diferencia, pues por ejemplo, si comprendemos la táctica seguida por el PT brasileño: la de luchar por pan y trabajo como vía de derrocamiento a la dictadura brasileña; es decir: al luchar por el pan se está luchando por la libertad (he ahí una salida exitosa), aunque paradójico es que en Brasil hace muchos años ya alcanzada hipotéticamente la libertad, aún no se ha conquistado el pan, cuestión generalizada en el tercer y cuarto mundo. Del mismo modo, aunque sería susceptible a la crítica de alguien “pragmático”, la libertad está pendiente en todo el mundo también; la llamada Ley Patriota que rige EEUU es una demostración de aquello; de la misma manera el muro, puesto en la frontera con México, devela que el país de la “libertad” tiene gigantescas murallas de encierro, así como las casas del barrio alto en Chile.

Acudiendo a un umbral

El acontecimiento de la libertad se da en la organización, en la asociatividad. La colectividad es la recuperación de la naturaleza social del individuo, el sujeto colectivo es la síntesis de la alienación entre la sociabilidad perdida por la individuación y la conciencia parida desde la sensación del Yo. Por esto organizarse es luchar por la libertad, tener fe en la organización proletaria es tener fe en la humanidad y por lo mismo en la Libertad.
La raíz de la autodeterminación, de elegir decidir, es la asociatividad. Somos libres, es decir empezamos a decidir, en la medida en que los demás son libres. Como dice la antigua premisa libertaria: “tu libertad extiende la mía hasta el infinito” y en una sociedad de clases, en que la concentración económica se vuelve un todo poderoso monopolio transnacional, la lucha reivindicativa, la lucha por el pan está en primer orden.
El centro entonces es la organización, organizarse para luchar por el pan nos va haciendo libres, pues la única manera de ser libres es con “los otros” re-convertidos por medio de la asociatividad en “nosotros”.
¿Se puede conseguir el pan sin organización en los marcos de una sociedad de clases?… sí, pero no se puede ser libre. ¿Se puede ser libre sin estar organizado?… si, pero esa libertad solo será la libertad de comprar y vender en la medida de la inserción particular en el general sistema de intercambio de mercancías. Es decir, el grado de libertad es directamente proporcional a la cantidad de dinero que se traiga en los bolsillos o a la capacidad de deuda que se pueda contraer; se trata en todo caso, como dice el grupo de rock ataque 77, de una libertad condicional.
Entonces: Pan, Libertad y Organización son una triada contradictoria de movimiento, recobrar el sindicalismo como motor vital de pan y libertad es recobrar ese movimiento, ese ritmo, es recuperar la organización, la asociatividad, la colectividad como principio de sociedad...un nuevo modo de sociedad: libre y equitativa, gestionada por nosotros los trabajadores quienes hemos construido el mundo.